Halagos entre hermanos
Hay veces en las que te gustaría decirle algo bonito a alguien pero no lo haces porque no hay confianza y quedaría raro. Pero cuando estás entre hermanos tienes la confianza suficiente para decir cosas bonitas como éstas y sin estropear el momento:
M a E: Cuánto perdió tu moño. Cuando llegaste parecías Campanilla y ahora pareces la abuela de Piolín.
oOoOoOoOoOo
M: No sé de qué disfrazarme en Carnavales.
G: Podías ir de Bellatrix Lestrange.
M: Ah, pues mira, no es mala idea.
G: Además... ¡la ropa ya la tienes!
M: ...
oOoOoOoOoOo
M: No me digas más... ¡esa bolsa de cuero es de cuando eras juglar en la Edad Media!
E (la abre): Pues casi... hay una moneda de cien pesetas.
oOoOoOoOoOo
M: Me muero.
G: Tómate una sopa de pollo.
M: Me da asco la sopa de pollo.
G: Más asco me das a mí con ese catarro. Tómate la sopa.
Dos listas sacando una foto.
M a E: Cuánto perdió tu moño. Cuando llegaste parecías Campanilla y ahora pareces la abuela de Piolín.
oOoOoOoOoOo
M: No sé de qué disfrazarme en Carnavales.
G: Podías ir de Bellatrix Lestrange.
M: Ah, pues mira, no es mala idea.
G: Además... ¡la ropa ya la tienes!
M: ...
oOoOoOoOoOo
M: No me digas más... ¡esa bolsa de cuero es de cuando eras juglar en la Edad Media!
E (la abre): Pues casi... hay una moneda de cien pesetas.
oOoOoOoOoOo
M: Me muero.
G: Tómate una sopa de pollo.
M: Me da asco la sopa de pollo.
G: Más asco me das a mí con ese catarro. Tómate la sopa.
Dos listas sacando una foto.