Cómo no empaquetar un regalo
Me imagino que la mayoría de la gente ya tendrá todos los regalos de Reyes comprados y empaquetados, pero para los que aún están en el proceso tengo unos cuantos consejos sobre cómo no empaquetar un regalo. Esto está basado en mi experiencia abriendo cajas en el trabajo, pero creo que se puede aplicar a cualquier tipo de caja.
Mi top 3 de paquetes imposibles
1. Hay unas cajas, no sé si son de Correos o de UPS, que vienen muy bien cerraditas con algo que yo sospecho que es pegamento de ese que ponen para los ratones. En caso de utilizar esta caja para empaquetar un regalo es mejor no regalar nada perecedero, porque no se abre ni con cutter, ni con tijera, ni con nada. Ni con contraseña sería más segura esta caja. Es más, si la caja de Pandora en vez de un ánfora hubiera sido una de estas cajas otro gallo cantaría...
2. Hay otra forma muy segura de empaquetar cosas frágiles que tampoco es muy agradable a la hora de abrir el paquete. Son una especie de sobres acolchados que vienen rellenos con algo que parece restos de zombi incinerado con tropezones de ceniza purulenta. A lo mejor estoy exagerando, pero es la sensación que me da al cortar con las tijeras. Es aconsejable evitar este tipo de sobre acolchado para regalos a gente a la que le guste ir vestida de blanco o a la que no le guste barrer.
3. Y por último, una forma de empaquetar que también puede traer problemas: las cajas con documentación escondida. En mi trabajo es documentación, en este caso pueden ser felicitaciones, tickets regalo o incluso billetes. Las cosas importantes hay que protegerlas, pero no esconderlas entre el papel de regalo o pegarlas en un lado de una caja que se va a tirar, o mejor, situarlas estratégicamente para que sea lo primero que se raje con las tijeras. Así no.
Mi árbol de Navidad no tiene una alfombra de regalos,
por eso pongo sólo la parte de arriba.
Mi top 3 de paquetes imposibles
1. Hay unas cajas, no sé si son de Correos o de UPS, que vienen muy bien cerraditas con algo que yo sospecho que es pegamento de ese que ponen para los ratones. En caso de utilizar esta caja para empaquetar un regalo es mejor no regalar nada perecedero, porque no se abre ni con cutter, ni con tijera, ni con nada. Ni con contraseña sería más segura esta caja. Es más, si la caja de Pandora en vez de un ánfora hubiera sido una de estas cajas otro gallo cantaría...
2. Hay otra forma muy segura de empaquetar cosas frágiles que tampoco es muy agradable a la hora de abrir el paquete. Son una especie de sobres acolchados que vienen rellenos con algo que parece restos de zombi incinerado con tropezones de ceniza purulenta. A lo mejor estoy exagerando, pero es la sensación que me da al cortar con las tijeras. Es aconsejable evitar este tipo de sobre acolchado para regalos a gente a la que le guste ir vestida de blanco o a la que no le guste barrer.
3. Y por último, una forma de empaquetar que también puede traer problemas: las cajas con documentación escondida. En mi trabajo es documentación, en este caso pueden ser felicitaciones, tickets regalo o incluso billetes. Las cosas importantes hay que protegerlas, pero no esconderlas entre el papel de regalo o pegarlas en un lado de una caja que se va a tirar, o mejor, situarlas estratégicamente para que sea lo primero que se raje con las tijeras. Así no.
Mi árbol de Navidad no tiene una alfombra de regalos,
por eso pongo sólo la parte de arriba.